quarta-feira, 12 de maio de 2010

CASAS DE PIEDRAS - UN SOLO QUARTO

El texto abajo fue sacado totalmente del sitio www.conpoder.com


Casas de Un Solo Cuarto

Habiendo pasado muchos años después de que Israel se había establecido en la tierra
de Canaán y dejado su vida nómada trocándola por una más estable con progresos agrícolas, principiaron las casas a tomar el lugar de las tiendas como lugares para vivir. La mayoría de los hogares de la gente del pueblo se constituía de una sola pieza o cuarto. Piensa el Dr. Thompson que porque la viuda que asistió a Elías tenía una pieza en la parte alta de su casa, que ella no era de la clase más pobre, sino que se encontraba en estrechez debido al hambre que se hacia sentir en toda la tierra (cf. 1 Reyes 17:8-19).





PROPOSITO DE LA CASA


En los tiempos bíblicos los hombres no construían sus casas con la idea de pasar en
ellas la mayor parte de su vida. Su primordial interés era pasar tanto tiempo como fuera posible fuera de ellas, admirando las obras de Dios. La casa servía como un lugar de retiro. Por esta razón las paredes de las casas no son muy tentadoras. No se hacían esfuerzos para atraer la atención a este lugar de retiro.

El propósito de estas moradas se sostiene en el significado de las palabras hebraica y
árabe para "casa". El Rvdo. Abrahám Rihbany que nació en Siria y vivió allí sus primeros años, ha hecho una exposición muy cierta acerca del significado y propósito de la casa de Palestina.

La palabra hebrea bavith y la palabra árabe bait quieren decir "abrigo". El equivalente
español es la palabra "casa". El término más significativo "hogar", nunca ha sido inventado por los hijos de Palestina, porque ellos se consideran como "peregrinos en la tierra". Su tienda y su casita le proveyeron abrigo suficiente para él y sus familiares durante la peregrinación mundana o terrenal.Como los palestinos pasan tanto tiempo fuera de sus hogares, los escritores sagrados gustaban de referirse a Dios como su "abrigo" o su "refugio" mejor que como su hogar. Tales expresiones en conexión con Dios son muchas en el libro de los Salmos y los escritos proféticos (cf. Sal. 61:3; Isa. 4:6).




PISO Y PAREDES DE LA CASA

Refiriéndose a la naturaleza del piso de estos hogares orientales dice el Dr. George A.
Barton: Generalmente las casas no tienen otro piso que el de la tierra misma que se empareja y aplana, hasta quedar maciza. Algunas veces se hace una mixtura de cal con lodo y dejándolo algún tiempo para que se seque y endurezca Algunas veces se ha encontrado pisos de piedra resquebrajada unida con cal. En el tiempo del Imperio Roma. no fueron introducidos los pisos de mosaicos con incrustaciones dc cuadritos de piedra labrados.


Las paredes de la casa por lo regular son hechas de adobes que se fabrican con lodo
secado al sol. Job al referirse a esta clase de moradas dice: "casas de arcilla" (Job. :9). Son muy parecidas a las Casas de adobe en México en la actualidad y muy frecuentes en los estados del Sureste de América, donde la influencia española aún predomina.


Algunas veces las paredes se hacen con una piedra muy áspera y muy común en el país. Estas son de distintos tamaños y pegadas con lodo. Las junturas son algunas veces anchas e irregulares. Sólo los palacios y las casas de los ricos se construyen con piedras labradas, como los palacios de Salomón (1 Reyes 7:9), y las de los ricos del tiempo de Isaías, que se jactaban diciendo: "Los ladrillos cayeron, mas edificaremos con cantería" (Isa. 9:10).


CONSTRUCCION DEL TECHO

En estas humildes casas de Palestina el techo se construye con vigas de madera que
alcanzan de pared a pared, luego se pone una capa de pasto, o quizá de ramas poniéndose sobre ésta una capa de tierra o arcilla; luego se riega sobre ella arena y gravilla, pasándose luego sobre ella un rodillo de piedra, el cual permanece sobre el techo para usarlo varias veces apisonando el techo y con especialidad durante las primeras lluvias, para que así no se escurra el agua al través.



Se construía un pretil o parapeto con trechos en las casas antiguas para permitir escurrir el agua de lluvia, y para evitar la caída de alguna persona. El no construir dicho pretil en los tiempos modernos ha causado accidentes con alguna frecuencia. La Ley de Moisés es muy definida al ordenar la construcción del pretil mencionado. El reglamento dice: "Cuando edificares casa nueva, harás pretil a tu terrado, porque no pongas sangre en tu casa si de él cayere alguno" (Deut. 22:8). El uso común de la casa para tantas cosas, hicieron esencial esta ley, como podemos comprender.


COSAS INTERESANTES CRECEN EN TECHOS Y PAREDES


Hierba en los Techos. Estando los techos de la casa en gran parte hechos de tierra y
arcilla podemos imaginarnos cómo crecerá la hierba encima de las casas, como lo indican lãs referencias bíblicas "serán como la hierba de los tejados, que se seca antes que crezca" (Sal. 129:6; véase también 2 Reyes 19:26; Isa. 37:27). Ejemplos de esto en techos similarmente construidos se ven con frecuencia en los tiempos modernos. En un libro publicado en la última parte del siglo XIX hay una fotografía de un techo palestino cubierto con hierba en crecimiento.



El pie de la fotografía es el siguiente: "Este es un buen ejemplo de la apariencia de hierba sobre los tejados". Después de las lluvias de invierno, todo edificio con techo de lodo está sobrecargado de yerbas, las cuales pronto perecerán. Techo con goteras. Se puede entender lo natural que será que techos de tierra, después de fuertes aguaceros, produzcan goteras: lo que hace inconveniente para la família vivir en esas casas. Los viajeros que pasan la noche en una de esas habitaciones, han tenido a veces que mover su cama, por causa de las goteras causadas por el agua de lluvia. El libro de los Proverbios compara estas goteras a una mujer rencillosa (Prov. 19:13; 27:15).



Excavaciones de los ladrones. Ya que las paredes de las casas frecuentemente se construyen con tierra y arcilla, o de piedras pegadas con lodo, es tarea fácil para los ladrones hacer un agujero y entrar a la casa. La referencia que tenemos en Job dice: "En las tinieblas miran las casas, que de día para sí señalaron; no conocen la luz" (Job 24:16). También Jesús a esto aludió en su gran Sermón de la Montaña: "No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan" (Mat. 6:19; 24:43).


Víboras en las paredes. Ya que las paredes de las casas han sido construidas de piedra y que las junturas son anchas e irregulares, fácil es para las víboras entrar en esas aberturas e intempestivamente entrar en contacto con los habitantes. Acerca de esta clase de casas el profeta Amós habla de un hombre que "entrare en casa y arrimare su mano a la pared y lê muerde la culebra" (Amós 5:19).




VENTANAS Y PUERTAS

Ventanas. Las casas orientales tienen pocas ventanas, las cuales se abren hacia la calle, y éstas son bastante altas. Por regla general las ventanas tienen barrotes de madera que sirven de protección contra los ladrones, y la parte baja de la ventana tiene una especie de "biombo enrejado". "Porque mirando yo por la ventana de mi casa, por mi celosía" (Prov. 7:6) –

Postigos de madera cierran las ventanas por la noche. Cuando se abre la ventana los que están dentro de la casa pueden ver hacia fuera sin ser vistos ellos mismos. Puertas. Tanto las puertas como las ventanas ordinariamente eran construidas de madera de sicómoro. Sólo por lujo de los ricos y como ornamento eran construidas de cedro (cf. Isa. 9:10). Las puertas se montaban sobre bisagras y "Se revolvían sobre sus quicios" (Prov. 26:14). Las puertas quedaban firmes al cerrarse, y esto se lograba con el uso de barrotes de madera (Prov. 18:19) –








La puerta de la casa consistente en un solo cuarto y propiedad de un labriego, se abre
antes de la salida del sol y queda abierta durante el día como invitando a la hospitalidad. Em Apocalipsis se dice: "He aquí, he dado una puerta abierta" (Apoc. 3:8). El cerrar la puerta indica que sus habitantes han hecho algo de qué avergonzarse (cf. Jn. 3:19). Al ponerse el sol, se cierra la puerta permaneciendo así toda la noche (cf. Luc. 11:7). El reglamento para abrir la puerta de una casa sencilla o chica no es observado en las ciudades en casa de más de uma pieza. La referencia de nuestro Señor Jesucristo llamando a la puerta se refiere a ella (Apoc. 3:20). La diferencia entre las casas de un morador de una villa y de una morador de la ciudad, debe siempre establecerse para poder entender las referencias escriturales respecto a las casas.

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